Pregunta que me hizo el hijo de un amigo mio de edad de 23 años;
¿Por qué las personas no hacen otra cosa que quejarse continuamente por todo, como si la vida no fuera amable con ellas?
Sabes me recuerdas a mi a tu edad, las mismas preguntas y reflexiónes sobre la vida, particularmente sobre la manera que la gente tiene de vivir siempre quejandose por todos y por todo, reaccioando demasiado tarde ante las situaciones cotidianas que la empobrecen y automarginan, de un mundo que tiene una Luz que no todo el mundo percibe aún estando ahí para todos, la Luz de la vida de la dicha, la felicidad y de todas la posibilidades... sin olvidarnos que inexorablemente el sufrimiento también forma parte de ella y debemos aprender a canalizarlo, a vivirlo intensamente y después deshacernos de el por completo, por que la vida continua...
El problema es que el pensamiento de la edad de la rebeldia en la que nos comemos el mundo, habitualmente en la persona media, deja paso a una situación de aceptación de las circunstancias personales de cada uno, sean las que fueren, en lugar de seguir buscando el camino que a cada uno le provea de las mejores condiciones para progresar y superar con éxito los distintos avatares de la vida, se suele decir que hay que resignarse, que la vida es así, que poco o nada se puede hacer, que mi tren ya paso de largo, que ahora ya es tarde para cambios; no puedo arriesgar lo que tengo, tengo mujer, hijos y una hipoteca que pagar, y esto lo dice una persona de 35 años. Miedos, miedos y más miedos, autorecetas de mediocridad y autoengaño directamente al subconsciente, programandonos para la desidia y el abandono prematuro de todo lo que signifique una vida mejor, por que pensar sobre estas cuestiones u otras es demasiado complicado...
Y lo es, no cabe duda... es complicado por que no entendemos su mecanismo, "El funcionamiento de la mente", y divagando... entre sueños y proyectos que núnca se realizaran van pasando los años, y con ellos agonizando todo atisbo de superación y lucha por realizarlos.
La mente es compleja, y a la vez extraordinariamente sencilla;
Podemos educarla; cuando somos niños, pero no nos equivoquemos, también de adultos.
Podemos adiestrarla y domarla; como a un potro salvaje.
Podemos reprogramarla; como a nuestra computadora, dotandola de la información más enriquecedora y provechosa.
Pero sin duda lo que mejor podemos hacer, es vaciarla de todo condicionamiento que encadena y empobrece a viejos paradigmas e ideales absurdos, y dejar que se retroalimente del vasto universo de la conciencia y la supraconsciencia, de nuestra inteligencia superior, que nace por si misma y no necesita mezclase con nada...
"La Meditación es la mejor formula para ver, oir, sentir, oler y tocar; "La Verdad"... agudizando hasta límites insospechados la intuición, abriendose ante uno, un vasto e infinito universo creativo del campo de todas las posibilidades, para aquel que lo experimenta".
¿Por que no lo pruebas y después me lo cuentas?
Un Abrazo y Luz para el Camino